FANTASIAS SEXUALES

FANTASIAS SEXUALES

Según Masters y Johnson, pareja que revoluciona en el capo de la sexología, las fantasías pueden surgir de diferentes contextos, de forma intencional, como lo son las exploraciones, la persona se imagina una orgia o relaciones con alguien de su mismo sexo y hasta cambio de pareja; las interpersonales, caracterizadas porque la persona se imagina teniendo relaciones con un extraño u observando a otras personas teniéndolas, lo que se conoce como voyerismo, como en el caso de la señora preocupada por su hijo con afiches en su habitación; y las fantasías sadomasoquistas que se refieren a la excitación que la persona tiene a través de sentimientos de dominación o sometimiento, con imágenes donde se golpea a alguien o se le fuerza en contra de su voluntad a tener relaciones. Ahora bien, si de estas fantasías de tipo sadomasoquistas, se llevan a la práctica, entonces si hay que prender las alarmas porque se estaría cayendo en alteraciones de orden patológico.

Es posible que una fantasía sea, para algunas personas, una estrategia de superación de un problema sexual, o como lo afirma María dolores Avía, “una experiencia de una persona de baja autoestima porque se considera poco atractiva y nada deseada” y el problema es que sus fantasías pueden estar representadas por situaciones ridículas o de fracaso, lo cual haría caer en estados de desanimo y depresión. Todo es posible en el campo de las fantasías porque puede suceder lo contrario en personas con el ego izado muy alto, los cuales se imaginan en situaciones sumamente agradables y deliciosas con personas superdotadas física y sexualmente, esto les infla la autoestima y viven en un mundo de ilusión en lo relativo  a la exploración  sexual.